Followers

martes, 31 de enero de 2012

Dulces Sueños.....O No (parte 2)

-¿Que-quien rayos eres? –le pregunte

-¿Qué quien rayos soy? -estallo en una gran carcajada, haciendo que se me erizara mi piel.- cariño ¿es que no me reconoces?.....yo…soy tu.

- ¿Qué?-eso no es cierto….tu-tú no puedes ser yo.- negué lo que ella había dicho, aunque era claro que teníamos el mismo rostro eso no era posible; di un paso atrás esperando tomar la mano de Demian para que nos fuéramos, luego me percate de que él no estaba detrás de mí.- ¿Demian? ¿Dónde está Demian? ¿Qué le has hecho?–le pregunte intentando no entrar en pánico

-Tranquila pequeña, él se encuentra en otro sueño o recuerdo-como quieras llamarlo- era necesario que estuviéramos solas para poder hablar.- dijo con una maliciosa sonrisa y acercándose a mi

-¿De qué diablos estás hablando? ¿Recuerdos?...dime en donde esta Demian.-le exigí molesta


-Demian. Demian. Demian.- repitió con una voz burlona.- demonios niña, no sabes decir otra cosa que no sea ese estúpido nombre. Si realmente supieras quien es en realidad tu adorado Demian, no lo estarías llamando de esa forma tan patética, incluso estoy más que segura que si lo vieras, tratarías de matarlo, cosa que con mucho gusto me gustaría ver.

-¿Dónde está Demian? -Pregunte de nuevo ya algo harta de sus comentarios, aunque eso que había mencionado sobre Demian, me hizo dudar un poco.

-Hmm…como lo digo….Digamos que lo esfume de este recuerdo, para que nosotras pudiéramos platicar mucho mejor, además estarlos viendo cómo se dicen cosas de los más ridículas y cursis hacen que quiera vomitar o matar a alguien.

-¿De qué hablas? ¿Por qué dices esas cosas? –seguía preguntándole cada vez más nerviosa ¿porque decía eso sobre Demian? Entonces… ¿realmente si lo había conocido antes? -¿A dónde mandaste a Demian?

-¡Dios! -grito bajando los brazos exasperada.- si tuviera un arma créeme que en este preciso instante me volaría los sesos, solo para no seguir escuchando tu estúpida voz chillona, mocosa idiota.- se acercó más hacia mi molesta y yo retrocedí algo asustada ¿Qué me pasaba? ¿Por qué de repente me sentía tan atemorizada y nerviosa ante ella? –no puedo entender que , siendo tan malditamente débil seas la que este ahí afuera disfrutando muy bien de la vida-bueno si a eso tú le dices disfrutar para empezar-, mientras que yo estoy aquí encerrada en esta maldita y jodida oscuridad viendo como desaprovechas todo, ¡todo! -sus ojos y su cabello comenzaron a volverse negros, lo que significaba que esto no iba para nada bien.

-¿Quién eres? –le volví a preguntar armándome de valor.

Ella-yo-me miro a los ojos con una sonrisa sardónica y se acercó un poco más haciendo que estuviera ahora a medio metro de distancia.- ya te lo dije mocosa…yo soy tu…bueno.- chasqueo la lengua y ladeo un poco la cabeza.- digamos que soy una versión mucho mejor de ti, más divertida y poderosa….para ser más precisos-soy tu verdadero yo Violet. Soy la oscuridad que está dentro de ti y que te niegas a reconocer.- explico un sonriendo

-Eso-eso no es cierto.-negué dando otro paso atrás pero ella-yo-dio otro hacia delante.- eso no puede ser…. ¿Qué es lo que estás haciendo realmente aquí?

Ella dio una exhalación profunda por lo que sus rasgos comenzaron a normalizarse.- Enserio, que para estar a tu lado se necesita demasiada paciencia para no golpearte ¿es que no puedes hacer buenas preguntas o es que eres verdaderamente estúpida? Por qué no preguntas algo inteligente o es que te gusta irte por las preguntas más fáciles e insulsas. Pregúntame algo bueno. Como no se se…. ¿Cómo me hago realmente fuerte? ¿Crees que sea buena idea cazar 3 humanos en vez de 5? O ¿este color de vestido hace que quiera vomitar?...y la respuesta es sí. ¡Diablos! ¿Quién te odia tanto como para convencerte de que ese tonto vestido es bonito? –ewww, si en verdad quieres permanecer como una virgencita simplona, créeme cariño, te está resultando muy bien tu camino para convertirte en una monja

No sabía cómo sentirme realmente por lo que ella me había dicho, si asustada, ofendida, nerviosa o furiosa-pensándolo bien, creo que la segunda y cuarta opción eran las más aceptables.- si es así como me veo.-hice un gesto con la mano para señalar mi vestido.- creo que tú también eres una maldita virgen simplona ¿no recuerdas que había dicho que éramos la misma persona? –no me inmute cuando vi un destello de molestia en sus ojos

-Tienes algo de razón Violet, pero por si no te has dado cuenta- gracias a dios- no estamos vestidas de la misma manera.- imito mi gesto con la mano de una forma sobreactuada para que la observara y tenía razón; estaba vestida de negro completamente, con unos pantalones de cuero ajustados, un top tipo corset y una botas de tacón de aguja que le llagaban hasta los muslos; viéndola a ella vestida de esa forma me sentía algo rara con mi vestido, a comparación de ella, yo parecía una niña.

Viendo que ella-yo- estaba un poco más calmada-lo que hacía que yo también lo estuviera-me atreví a preguntarle: ¿yo conocí alguna vez a Demian? –espere a que ella volviera a gritarme o burlarse de mí, pero ella solo se me quedó mirando seriamente antes de contestar.

-¿Realmente no lo recuerdas verdad?-respondió sin una clase de emoción en su voz -Dímelo pro favor.- le pedí

-No. No lo hare. Creo que es mejor que tú lo descubras por tu propia cuenta, así cuando vea tu reacción, será el momento adecuado para salir.-

-No te entiendo.- parpadee algo más confundida.- ¿y tú dices que yo soy la que hace preguntas estúpidas? Para empezar tú dices cosas sin sentido alguno.- le reclame

-No lo dije para que lo entendieras.-se inclinó un poco mirándome fijamente a los ojos.- Solo te diré que eso ya había pasado antes y pude salir de este lugar….lo que significa que mi estadía aquí dejara de ser permanente para mí y desgraciadamente tú sabrás a lo que me refiero. Ahora.- dio un paso atrás y sonrió.- es mejor que me marche, pero ten en cuenta Violet, que pronto nos volveremos a ver…y no será nada agradable.- dio media vuelta y comenzó a alejarse

-¡Espera!-le tenía que preguntar, no entendía para nada lo que me había dicho pero tenía que preguntarle, era mi última oportunidad.- ¿cómo? ¿Cómo puedo controlar mi poder?

Ella dio la vuelta y me dirigio una mirada divertida.- El odio.- dijo sin dejar de sonreír. No sabía porque cada vez que ella sonreía, mi piel se erizaba.- El odio. El miedo. Él está furiosa o tener algunas de esas emociones hará que tengas más control sobre este ¿no te has dado cuenta que cada vez que siente el odio dentro de ti, el poder crece o una excitante sensación recorrer por tu cuerpo?... Si es así, vas por buen camino, solo ten en cuenta que entre más abuses de esas emociones, yo seré libre….y no te gustara.- dijo esa últimas palabras antes de desaparecer delante de mis ojos.

Permanecí un momento ahí parada tratando a asimilar es extraña conversación con mi otro yo por lo que luego me estremecí un poco con solo el pensar que tal vez-no lo sé-que ella tenía algo razón.- eso no puede ser verdad.- me dije.- esto es solo un sueño. Esto es solo un sueño, ahora despiértate Violet.- me repetí varias veces para poder salir de ese lugar, aun quería buscar a Demian, estaba segura que no era buena ya que no era nada bueno el pensar sobre él. Yo me iba a casar dentro de dos semanas con Eric. Pasaría el resto de mi vida con él y no era para nada aceptable el pensar y mucho menos el soñar con otro hombre….pero lo que me había dicho esa mujer había provocado que ya no dejara de pensar por más que quería hacerlo.
miércoles, 18 de enero de 2012

Dulces Sueños.....o No (parte 1)

Estaba corriendo por un enorme jardín. Un denso, enorme y…. un muy familiar jardín. No sabía hacia donde me dirigía exactamente, solo tenía esa extraña sensación que me hacía correr; Me detuve un momento y mire a mi alrededor-en realidad sí que me era algo conocido este lugar, lo sentía como una clase de deja vú. El sol estaba en lo alto haciendo que este jardín se viera realmente hermoso. Mire debajo y no traía puestos mi zapatos- ¿Por qué no los traía puestos? Que rayos importaba- también me di cuenta que traía puesto uno de mis vestidos favoritos-era color blanco, con un corte ovalado. Este me llegaba una pulgada debajo de mis rodillas, era estilo vintage-muy de los años 50-tenía una pequeña hilera de botones del mismo color en la parte de enfrente, magas cortas-me encantaba este vestido, desde que Alice me lo había enseñado siempre había querido lucirlo, pero no encontraba el momento adecuado para hacerlo. Deje de mirar mi vestido ya que había vuelto la necesidad de correr, así que lo hice.

Me pare en seco cuando supe porque realmente estaba corriendo por ese jardín. El se encontraba recostado con los ojos cerrados sobre un enorme y muy bonito árbol de cerezos.-Demian.- musite soltando un suspiro. Aunque trataba de mantenerse alejado de la luz del sol, gracias al árbol, pero unos pequeños rayos del sol lograban filtrarse tocando así levemente su estupendo rostro.; apreté con fuerza la falda de mi vestido mientras me quedaba ahí parada observándolo.

Mi corazón se paró por un instante y volvió a palpitar con mayor fuerza, cuando Demian abrió los ojos y miro hacia mi dirección; al verme el sonrió-dios como amaba esta pequeña-sexi-sonrisa suya. Yo le devolví la sonrisa y comencé a acercarme lentamente.

-Viniste.- dijo aun sonriendo. El viento soplo un poco haciendo que mi cabello se alborotara un poco; lo tome y me di cuenta que en este sueño lo tenía largo-

-Te dije que vendría.- le conteste ya estando a su lado. Demian tomo mi mano y la beso, sin apartar sus ojos de los míos.

-No pensé que lo harías.- comento algo avergonzado.- creí que te quedarías un tiempo más con Marco.-

Yo lance un resoplido.- ¿Enserio creías que preferiría estar con él a estar contigo? –tome su rostro con mis manos para que me mirara.- ¿Es que eres tonto? –Ambos reímos.-Estaba tan ansiosa por venir que ni siquiera me puse zapatos.-levante un poco mi vestido para que viera mis pies.-Lo deje botados en algún lugar. Me los quite para así llegar más rápido.-confesé

Demian acaricio la mano que aun sostenía su rostro.- Solo cuando estoy a tu lado me comporto de esa forma.-añadí. Sus carnosos labios curvaron una media sonrisa, haciendo que me sonrojara y que me mordiera un poco mi labio inferior. Lentamente el empezó a acercarse a mi rostro, hasta el punto de poder sentir su aliento sobre el mío. Cerré los ojos y en se momento sentí sus labios sobre los míos.

 Me acerque más a él y coloque mis brazos sobre su cuello y mis dedos acariciaban su sedoso cabello. Demian rodeo con sus brazos mi cintura y me estrecho contra su cuerpo; el contacto de sus labios con los míos hizo que se me volviera a acelerar el pulso, rápidamente sentí como nos movíamos sin dejar de besarnos apasionadamente, hasta el punto de que yo estuviera recargada sobre aquel árbol; inconscientemente solté un pequeño gemido cuando el mordió mi labio, lo que causo que él se separara de mi.- ¿Te lastime? –pregunto algo nervioso

Abrí los ojos y me sentí algo desorientada.- ¿Por qué te detuviste?-le pregunte entre jadeos.

-Yo-yo pensé que te había hecho algún daño.-

Reí cuando insinúo eso.- El único daño que me has hecho, es el que hayas dejado de besarme como lo estabas haciendo hace unos instantes.- jale de su camisa para volverlo a besar ¿Cómo es que yo me comportaba de esa forma con y con Eric no? No entendía para nada este sueño tan extraño pero.- me encanta este sueño.-pensé Demian volvió a separarse de mi lo que hizo que gruñera un poco ¿desde cuándo yo hacía eso?

Tomo mis manos y me miró fijamente. Me encanta la forma en la que él me miraba, con tanta ternura y cariño, simplemente lo amaba, pero no sabía cómo decírselo ¿Él lo aceptaría o me rechazaría? No. Para empezar no me estaba rechazando hace unos segundos

  -Hay algo que quiero decirte Violet.- dijo seriamente

-¿Qué cosa? –

-Yo…Hmm…no sé cómo decirlo.- ay no ¿me iba a decir que tenía que terminar? Si es hacia me destruiría, si era por lo vulturis, bueno…tal vez lo entendería pero…ay no por favor que sea otra cosa ¿entonces para eso era esta cita? – Violet…yo…-trago un poco.-

-¿Romperás conmigo? –Le inquirí nerviosa.- ¿Es por los vulturis verdad?-Sé que no deberíamos estar haciendo esto, yo te impulse hacerlo y me disculpo.-no podía dejar de hablar, era como si mi lengua escupiera parte de mis inseguridades. Un momento ¿él era parte de los vulturis? Esto era algo extraño, pero seguí hablando.- No era mi intención meterte en una situación como esta. Tú le sirves a Aro y…-explique rápidamente que mi voz comenzó a quebrarse. Deslice mis manos de las suyas y di un paso atrás, mirando al suelo Pero que tonta era al pensar que algo bueno podría ocurrir de este viaje.-Entiendo que no te quieras tener algo conmigo. Finalmente me atreví a levantar la vista y note como Demian me miraba realmente confundido, había puesto los ojos en blanco ¿Por qué me miraba de esa manera? Debería estar feliz de que lo librara fácilmente de esta “casi relación” -Violet…yo no me refería a eso-sino… -Entiendo. No tienes por qué disculparte.- una pequeña lagrima comenzó a correr por mi mejilla.-Demian…

-Te amo Violet.- dijo abruptamente

-……lo entiendo… espera ¿Qué?- Me tomo un momento entender lo que él había dicho ¿Demian había dicho que me amaba? En ese instante mi corazón dio un gran vuelco

-Dije que te amo Violet.-se acercó más y con su mano tomo mi barbilla para que lo mirara.- Eres la chicas más hermosa, dulce, gentil que he conocido en toda mi vida.- yo parpadee confundida. Acuno mi rostro con sus manos y me dio un ligero beso en la punta de mi nariz.

-Tu... ¿tú me amas?-Le pregunto aun algo escéptica

Demian al ver que yo aún no reaccionaba ante su declaración, el soltó una risotada.- Por supuesto que te amo Violet. Mi querida y adorable fioletovyĭ.-esa última palabra la susurro cerca de mi odio, causando que mis piernas temblaran y ahogara un gemido.

-¿Qué significa esa palabra? Dije tímidamente

  -Es tu nombre en ruso Violet.- índico acariciando el contorno de mis labios .-pero si no te gusta, ya no te llmare de esa forma.

-Me encanta.- exclame sonrojandome de nuevo

Recargue mi cabeza sobre su pecho, mientras el hundía la suya sobre mi cabello. Aspire e inhale el dulce aroma que su cuerpo desprendía, lo provoco que me volvieran a temblar las piernas ¿Había mencionado lo bien que olía? Apreté su camisa; le tenía que decir lo que sentía por el-demonios ¿Por qué este sueño se sentía tan real pero a la vez tan distante? – Demian.- mi voz temblaba un poco, por lo que tuve que aclarar un poco mi garganta.- Demian. Yo también te amo…. Sé que no soy una experta en esto-bueno ya que tú eres el primer hombre del cual me he enamorado-pero aun así sé que lo hago.- le revelé. Levante mí de nuevo de rostro y me quede sin aliento al ver cómo me miraba; era con tanto amor pero a la vez con tanta pasión que me quede ahí quieta admirándolo.- Me alegra el hacerte conocido.

-Violet….-su rostro se ilumino.- Yo te extrañaría aun si no te hubiera conocido.- tomo un mechón de mi cabello y lo erizo con los dedos para después colocarlo detrás de mí oreja. Volvió a besarme, pero esta forma fue diferente-dios. Sí que fue diferente. Quería permanecer en ese sueño, era tan perfecto que deseaba con el alma que algo de esto en realidad fuera de verdad… pero lamentablemente no lo era, pero ¡Hey, hay que disfrutarlo mientras se pueda!

-Puaj…pero que cursi y empalagoso, creo que si tuviera sentimientos, en ese preciso instante vomitaría.- dijo una extraña y muy familiar voz detrás de nosotros. Separe mis labios de los de Demian y voltee a ver quién había hablado. Abrí los ojos como plato para ver de quien se trataba. No lo podía creer, con ella aquí presente, demostraba que todo estos sí que era un sueño.

Se encontraba a unos cuantos metros de nosotros, recargada sobre un árbol con los brazos cruzados.- Hola Violet.- saludo maliciosamente

-¿Qui-quien rayos eres? –le pregunte

-¿Qué quien rayos soy? -estallo en una gran carcajada, haciendo que se me erizara mi piel.- cariño ¿es que no me reconoces?.....yo…soy tu.-
domingo, 15 de enero de 2012

Oh si...Manten el Control y la Calma Cariño (parte 2)

Sentí una especie de alivio cuando más me acercaba a la salida, aún estaba conteniendo la respiración ¿Cómo demonios todo el lugar de infesto de olor a sangre tan rápido? -Ah… duh, es un hospital Einstein; sonreí sin querer cuando la puerta se abrió y me dispuse a abandonar el hospital-solo dios sabía que habría estado yo a punto de hacer si permanecía más tiempo ahí. Al meter mi mano en el bolcillo de mi chaqueta para sacar las llaves del auto, una mano tomo mi brazo haciendo que me detuviera.

-Violet, mi amor ¿Qué sucede? –Me sorprendió lo rápido que había llegado Eric hasta donde yo me encontraba, debía de agradecerle a la recepcionista por su excelente trabajo.- la recepcionista me llamo diciendo que me estabas buscando y que era muy importante.-

En ese instante mi cerebro se había desconectado, lo único que estaba haciendo en ese momento era el recordarme no respirar, si lo hacía, estaba más que segura que iría a un lugar de ese hospital y tomaría a cualquiera que se me llegara a cruzar…y me aterraba.- ¿Qué sucede Violet? ¿Hay algo mal? - dijo Eric mientras trataba de entender que me pasaba. No sabía que hacer-daba gracias de poder aguantar por varios minutos las respiración, sino en estos momentos estaría azul o incluso ya me habría desmayado-creo que habría sido mejor puesto que así ya no sentía más el aroma a sangre.

Apreté mis puños y decidí abrir la boca, no solo para hablar sino también para poder respirar ya que me estaba mareando un poco-genial, mi aguante para contener la respiración era un asco.- Está pasando de nuevo.- dije con un hilo de voz.

-¿Cómo dices? –

Aclare un poco mi garganta para que el entendiera lo que trataba de decirle.- Estoy perdiendo de nuevo el control. Cada vez estoy sintiendo más hambre-y no me fiero a un simple emparedado o algo así-que no puedo controlarlo. Hace unos instantes quise estrangular a Jasper y arrancarle la cabeza a Carlisle. E incluso en estos minutos estoy tratando de no respirar por la nariz para que así el aroma a sangre no me vuelva loca e intente arrogarme sobre cualquier humano que se encuentre cerca de nosotros.- le explique todo rápidamente que parecería que iba a caer en una especia de crisis nerviosa (que no faltaba mucho para que lo estuviera).

Eric me examino por unos instantes con sus enorme y bellos ojos azules, que normalmente me tranquilizaban; tomo mis hombros y me miro a los ojos.- Cariño. Todo va a estar bien. Será mejor que regreses a l casa y esperes hasta que yo llegue y así podremos hablarlo mejor.-

-No. No. No puedo esperar Eric, esto me está asustando.-

-No tienes por qué asustarte Violet, estoy seguro que todo esto tiene una explicación.-trato de razonar mientras acariciaba tiernamente mi mejilla.

- Por cierto ¿Cómo llegaste hasta aquí? ¿Viniste corriendo?

-Tome tu coche nuevo y conduje hasta el hospital.- al ver su rostro seguí.- tranquilo, no lo estrelle ni lo raye, está intacto.-

-No me importa el auto Violet, sino el hecho de que apenas estas aprendiendo a conducir y la simple idea de que te puedas hacer daño si llegaras a chocar- dios no lo quiera.-

-Siento que me va a pasar lo mismo que cuando estuvimos en la Push, cuando te ataque ¿no lo entiendes? El ansia de sangre y de poder, cuando te ataque en esa ocasione lo disfrute….la idea de dañar a alguien…se… se me hace realmente atractiva-confesé casi divagando

Eric abrió los ojos como platos, como si lo que le dije lo había alterado-bueno eso era evidente-pero no lo recordaba.

- ¿Co-como dijiste?

-¿Qué? – ¿qué había dicho? Ya no lo recordaba, sabía que era algo con lo que había hecho en la casa y con Carlisle

-Lo que mencionaste hace unos instantes.- apretó con más fuerza y se acercó más a mí

-Yo…yo no… ¿de que hablábamos Eric? –le pregunte. Me sentía algo extraña, como si estuviera ansiosa y atemorizada al mismo tiempo.-hay no puede ser… ¿otra vez dije algo extraño? ¿Estoy olvidando de nuevo? –volví a preguntar pero ahora estaba más nerviosa y mirándolo a los ojos.

Al ver que no me respondía, tome su mano fuertemente.- ¿Dije algo malo? –insistí algo alterada -No es nada de eso. Tú me estabas hablando de….-dudo un poco. Miro al suelo como si quisiera decir algo, levanto el rostro y me sonrió, pero esta no se reflejó en sus ojos.- de nada interesante cariño. Solo cosas de la boda, me decías sobre el tipo de flores que querías en los arreglos.- Algo me decía es de eso no estábamos hablando hace un momento, pero no recordaba sobre que era.

-No. No es eso. Sé que vine aquí para decirte algo importante-estoy más que segura que no eran sobre los arreglos florales para la boda.- apunte

-Hablaremos mejor cuando estemos en la casa, ahora estoy muy ocupado.- explico.- quisiera hacerlo cariño, pero el trabajo me reclama.- me miro algo apenado

-Descuida.-lo tranquilice.- Tienes razón, será mejor que hablemos cuando estemos en la casa. Será mejor que me marche.- me despedí dándole un suave beso en los labios. Camine hacia la puerta e involuntariamente lleve mi mano hacia mi nariz, era como si quisiera evitar el aroma que desprendía ese lugar.

Entre al auto y me quede un momento intentando relajarme-tranquila Violet, solo estas alucinando.-me dije.- solo son nervios.-me repetí pero ¿Por qué sentía que Eric me había mentido acerca de lo que habíamos estado platicando?, esto no se quedaría así.-sabes que te está mintiendo, solo quiere que sea la novia perfecta para así no tener que lidiar con tu estúpidos problemas mentales.- comento esta estúpida voz ¿es que no se cansaba de estarme molestando?

-oh solo cállate.- murmure y encendí el auto.

Llegue a la casa con más calma. Fui directo a mi habitación, estando ahí fui directo a abrir el cajón de mi tocador para sacar el pequeño diario que se encontraba allí guardado. Este era de tamaño normal y de color negro, muy parecido a los que usaba mi padre cuando hacia sus anotaciones sobre las investigaciones que nos hacía a Arthur y a mí. Anote la fecha en la esquina superior de la hoja; después de hacerlo me le quede mirando ¿Qué podía escribir? –eh…”hoy estuve a punto de hacer algo muy malo pero ni siquiera me acuerdo que diablos era” o creo que pondría “hoy me atreví y conduje sola el auto nuevo de Eric, por suerte no lo estrelle ni vomite en el por los nervios”-claro que no, así que mejor puse:

Hoy estuve en la casa con los Cullen tomando algunas clases de piano con nessie, creo que me fue bien, ya que no recuerdo muy bien, también fui a visitar a Eric al hospital, me he dado cuenta que esta es la primera vez que lo voy a visitar a su trabajo y me alegra que él se preocupe mucho en el salvar vidas.

Por alguna extraña razón no recuerdo muy bien el motivo por el cual fui a ese lugar, aunque él me lo explico….siento que no me decía la verdad ¿Por qué a él le resulta tan malo decírmelo? ¿Es que el piensa que me romperé si me dice la verdad? Sé que no lo hare. No me romperé….

Aunque hay veces en las que creo que lo hare, y no me refiero a sobre algunas cosas que tal vez me estén ocultando, sino a esta maldición… ¿Cuánto tiempo me queda? ¿Algún día llegare a ser como mi hermana?.... si es así…tengo miedo a que ese día llegue….
martes, 10 de enero de 2012

Oh si... Manten el Control y la Calma Cariño (parte 1)

Llegue lo más rápido que pude a la casa, mi respiración estaba acelerada y mi corazón latía rápidamente, quería detenerlo y calmarme, pero con el simple hecho de recordar lo que había estado a punto de hacer, hacía que estos siguieran así.- Va-¡Valerie! - llame estando aun recargada sobre la puerta.- Valerie.- volví a llamar pero no hubo respuesta-maldición, cuando ahora la necesitaba, no se encontraba en la casa. Fantástico.

Comencé a caminar de un lado a otro por toda la sala. Mire el reloj y maldije, todavía faltaban unas 5 horas para que Eric regresara del hospital-yo no podía esperar, necesitaba hablar con él. Me di cuenta que estaba mordiendo las unas por lo nerviosa que estaba- ¡yo nunca me mordía las uñas! Sabía que no era bueno estar aquí encerrada y esperar a que Eric llegara, la única manera de ir hasta él era….en coche-oh demonios-pensé. Trague un poco y mire hacia donde se encontraban las llaves del coche; no era buena idea tomarlo-aparte por el simple hecho que apenas estaba aprendiendo a conducir-Eric lo había comprado no hace más de un mes- yo + coche nuevo + al estar al borde de una crisis nerviosa-era claro que no era buena combinación- pero oh diablos, si lo estrellaba tenía que rezar para que Eric me perdonara, ahora lo que estaba pasando era muy importante.

Deje mi “pequeño” debate moral-mental-sobre tomar el auto nuevo de mi prometido, y fui hacia donde estaban colgadas las llaves y las tome. Al estar dentro del auto respire honde y me dije a mi misma que podía hacerlo, ya había superado mi fobia a los autos-bueno más o menos-gracias a me control mental y obligándome a ya no temerles; conté hasta tres y lo encendí, con mi mano aun temblando apreté tome el control para abrir el garaje, estando este abierto, acelere y me dirigí hacia el hospital.

Gracias a dios no me Salí del camino, ni choque con un árbol- ciervo -o transeúnte- y eso fue lo mejor que me pudo pasar en este día. Me estacione con sumo cuidado y Salí del coche casi corriendo-ignorando a los doctores y enfermeros que se me quedaban viendo detenidamente que estaban haciendo sentir más incómoda-me dirigí hacia la recepción donde se encontraba una recepcionista de cabello negro que parecía estar en sus 40.

-Buenas tardes.- me saludo amablemente

-Buenas tardes.- trate de sonreír también y disimular mi nerviosismo.-estoy buscando al doctor Eric Droesreh.-le dije a la recepcionista

-¿Quién lo busca y porque motivo? -pregunto mientras me miraba meticulosamente

-Dígale que lo busca su prometida y que es importante.- conteste.

 La recepcionista le hecho un vistazo un a su computadora para luego mirame  -Lo siento, pero este momento el doctor Droesreh se encuentra dándole el recorrido a los residentes, por lo que le sugiero que espere.- me indico los sillones que estaban no muy lejos de ahí.

No podía esperar, por lo que mire directamente a los ojos de la recepcionista y espere hasta que ella viera los míos.-yo necesito ver al doctor Droesreh.- comencé a decirle impaciente-sabía que no era buena idea usar mi poder en ella pero estaba desesperada-mi voz se estaba distorsionando un poco por lo que significaba que estaba surtiendo efecto.-Escucha bien. Tomaras ese teléfono y le llamaras al doctor Droesreh, diciendo que su prometida lo busca y que es de suma importancia.-comencé a sentir una extraña energía que me recorría por todo el cuerpo -en especial cuando miraba a esa humana, haciéndome sentir genial.- Cuando hayas terminado…-me detuve al ver la pequeña vena que sobresalía de su yugular-era tan apetitosa que me pase la lengua por los labios intentado imaginar cómo sabría la sangre de esa mujer ¿Cuánto tiempo me tomaría alejarla de esa mostrador y llevarla a lugar apartado? ¿Alguien se daría cuenta de que no estaba? ¿Y cuánto tiempo me llevara desangrarla hasta la muerte?.- Ahora…

-¿Violet? – una voz conocida detrás de mí me saco de mi serio-retorcido-pensamiento sobre almorzarme a esa adorable recepcionista, así perdiendo el control sobre la mujer. Me voltee algo molesta y vi a Carlisle.

-Hola Carlisle.- lo salude. Le dirigí una mirada de soslayo a la recepcionista que se veía algo confundida; internamente quería arrancarle la cabeza a Carlisle por hacerme perder a mi presa…ay por dios ¿mi presa?-temblé por la simple mención ¿acaso había estado considerando almorzarme a esa humana? Esto estaba mal, esto está realmente muuuyyy mal

-¿Violet te encuentras bien? –pregunto algo preocupado

-¿Qué?...ah, sí. Lo siento, me distraje un poco.- sonríe, sonríe- me dije casi conteniendo el aire ya que el olor a sangre comenzo a invadir todo el lugar

-Que está haciendo aquí hija.-

-Oh…bueno, solo…yo...ya sabes, quise visitar a Eric y traerle su almuerzo.-me mordí los labios cuando dije “almuerzo”. Carlisle se me quedo observando por un segundo como si quisiera decirme algo, hasta que luego comprendí.- y...al parecer no lo traje jejeje, soy una tonta, por lo visto hoy estoy muy despistada.- sonríe, sonríe.-me recordé

Increíble, el parecía creerse mi estúpida mentira, que era obvio que ni si quiera un niño se lo creería pero Carlisle lo hizo...o eso hizo parecer.- creo que el asunto de la boda siempre hace este tipo de cosas.- puso su mano sobre su hombro palmeandolo cariñosamente mientra sonriendo. Me sentía mal al mentirle.- Creo que Eric está ocupado, pero yo le diré que lo estás buscando.- se ofreció

-Oh, no. No hace falta que lo hagas.-hice un gesto negativo con la cabeza.- ya le pedí a la recepcionista que lo llamara.- le di una pequeña mirada a la mujer que por lo visto aún se notaba algo confundida>hazlo< le ordene mentalmente, haciendo que ella rápidamente me mirara y luego tomara el teléfono.- ¿lo ves? Esta listo, no te preocupes por mí, no quiero distraerte más de tu trabajo.- ahora lárgate y déjanos en paz.- dijo gruñendo de repente esta maldita voz en mi mente y en algo tenía razón

-Si quieres me quedo contigo a esperar a Eric.- insistió

-No hace falta.- volví a sonreírle.-no quiero molestarte. Ve a hacer tu trabajo Carlisle.-volví a sentir como esa extraña fuerza recorría de nuevo mi cuerpo cuando le hablaba a Carlisle; esta se sentía tan bien que quería seguir.- vuelve a tu oficina o a cualquier otro lugar donde te necesiten y olvidaras el haberme visto hoy, nunca nos encontramos en la recepción, así que márchate y déjame en paz.- le ordene. Carlisle parpadeo confundido, dio la vuelta y se dirigió hacia su oficina o sepa que otro lugar.- muy bien chica, lo estás haciendo muy bien.- dijo de nuevo esa voz en mi interior.- te gusta el poder que fluye dentro de ti en estos momento, lo mejor vendrá cuando drenes a esa humana.-voltee hacia la mujer que tenía la vista clavada en sus computadora, considerando la oferta de aquella voz.- sé que la deseas, al igual que a esos tiernos y jugosos bebes.- en ese instante recapacite sobre lo que estaba sucediendo, me aleje de aquella recepción o de cualquier humano ya que el olor a sangre se intensificaba cada vez de respiraba.

>oh,  esto no, no puede estar sucediendo>.-me dije mientras daba media vuelta y me dirigía hacia la salida, ya no quería ver a Eric, solo quería alejarme de ese lugar.- <oh si, chica. Está pasando <.- se burló aquella voz <